Con el inicio del nuevo año escolar, padres e hijos se preparan con uniformes, listas de útiles escolares, libros y demás materiales que permitan un desempeño escolar óptimo, pero olvidan que la salud es primordial para el desenvolvimiento adecuado de los niños al iniciar este nuevo periodo.
He ahí la importancia de realizarles un control médico general antes de que inicie el año escolar, con la finalidad de evitar el ausentismo causado por las afecciones usuales, como: parasitosis, alergias, enfermedades de fácil contagio, anemia, entre otras. Este chequeo permitirá que los niños empiecen el nuevo año con energías necesarias para tener un excelente rendimiento académico.
¿Qué pruebas se deben realizar?
El control médico ideal por el regreso a clases consta de exámenes de laboratorio, entre ellos: exámenes de sangre, orina y heces para identificar parásitos.
- Biometría hemática.
Es uno de los exámenes que se realiza con mayor frecuencia utiliza para el diagnóstico y seguimiento de enfermedades por medio del recuento del número de glóbulos rojos, glóbulos blancos, hemoglobina, hematocrito, índices eritrocitarios, recuento de plaquetas y diferencial de glóbulos blancos. Para el diagnostico de anemias, infecciones entre otros.
- Coproparasitario
El análisis coproparasitario se realiza con el fin de detectar en la materia fecal microorganismos como parásitos intestinales, microbiota bacteriana y elementos como almidones, células, y grasas, entre otros, para convertirse en una ayuda diagnóstica.
- Elemental Microscópico de Orina.
El Uroanálisis o EMO es un estudio físico, químico y celular de la orina, esta constituye una de las armas más valiosas que se tiene para obtener una información acerca del funcionamiento del aparato urinario e identificación de infecciones de vías urinarias.
Procedimiento para la toma de muestra sanguínea
Las agujas que se utilizan para las analíticas en los niños son más finas que en los adultos. El personal está altamente cualificado para realizar la técnica de manera rápida e indolora. Aun así, el miedo es el gran enemigo.
En los niños que lo puedan entender, es importante explicar el procedimiento y que los padres estén presentes durante la extracción, así el niño se sentirá más tranquilo y acompañado.
La punción de la vena se realiza con una aguja más fina que la que se usa en adultos previa desinfección de la piel. Se coloca, además, un torniquete en forma de tira de goma para facilitar el rápido llenado de las venas y facilitar la extracción de sangre.