La glándula tiroides produce la hormona tiroidea, que controla muchas de las actividades de tu cuerpo, incluso la velocidad en la que quemas calorías y cuán rápido late tu corazón. Las afecciones de la tiroides hacen que produzca demasiada o muy poca cantidad de la hormona.
Función de la glándula tiroides
Dependiendo de la cantidad de hormonas que produzca la tiroides, ya sea mucha o poca, te puedes sentir activa o cansada o puedes subir o bajar de peso. Las mujeres son más propensas a desarrollar enfermedades de la tiroides en comparación con los hombres, especialmente después de un embarazo o luego de la menopausia.
Las principales enfermedades del tiroides son:
Hipotiroidismo. Es una enfermedad causada por la disminución de la función normal (hipofunción) de la glándula tiroidea. Esto significa que la glándula tiroides no es capaz de producir suficiente hormona tiroidea para mantener el funcionamiento normal del cuerpo. Esta afección también se denomina tiroides hipoactiva. En las etapas iniciales, es posible que el hipotiroidismo no provoque síntomas evidentes. Con el tiempo, el hipotiroidismo sin tratar puede derivar en otros problemas de salud, como el colesterol alto o problemas del corazón.
Síntomas:
- Cansancio.
- Aumento de la sensibilidad al frío.
- Estreñimiento.
- Piel seca.
- Aumento de peso.
- Hinchazón de la cara.
- Ronquedad de la voz.
- Vello duro y piel áspera.
- Debilidad muscular.
- Dolores, sensibilidad y rigidez muscular.
- Ciclos menstruales con sangrados más abundantes de lo usual o irregulares.
- Afinamiento del cabello.
- Frecuencia cardíaca más lenta (bradicardia).
- Depresión.
- Problemas de memoria.
Hipertiroidismo. El hipertiroidismo ocurre cuando la glándula tiroides produce más hormona tiroidea de la que el cuerpo necesita. Una tiroides hiperactiva podría ocurrir como consecuencia de que el hipotálamo, la glándula pituitaria, o la glándula tiroides en sí misma no están funcionando adecuadamente. No es muy común encontrar una tiroides hiperactiva.
Síntomas:
- Inquietud
- Excitación
- Temblores
- Pérdida De Peso
- Frecuencia Cardíaca Acelerada
- Sudoración
- Intolerancia Al Calor
- Flujo Menstrual Irregular
- Afinamiento Del Cabello
- Cambios En El Sueño
- Movimientos Intestinales Frecuentes
- Bocio
PRUEBAS DE LABORATORIO PARA DIAGNOSTICO DE ENFERMEDADES TIROIDEAS
Los exámenes o pruebas de la función tiroidea se utilizan para revisar si la tiroides está funcionando normalmente.
Las pruebas de la función tiroidea más comunes son:
- T4 libre (la principal hormona tiroidea en la sangre — un precursor para T3)
- TSH (la hormona de la hipófisis que estimula la tiroides para que produzca T4)
- T3 total (la forma activa de la hormona — T4 se convierte en T3)
Si le están realizando pruebas de detección de enfermedad tiroidea, a menudo solo se puede necesitar la prueba de la hormona estimulante de la tiroides (TSH).
Otros exámenes de la tiroides son:
- T4 total (la hormona libre y la hormona vinculada a las proteínas portadoras)
- T3 libre (la horma activa libre)
- Anti microsomales (TPO) (PEROXIDASA TIROIDEA)
- Globulina fijadora de la hormona tiroidea
- Tiroglobulina y Anti- tiroglobulina
- Prueba de anticuerpos antitiroideos