Los estudios o pruebas prenupciales son procesos de laboratorio que forman parte de
los requisitos que una pareja debe de cumplir, al momento de solicitar la autorización
de la Autoridad para celebrar una boda civil.
El objetivo de realizar estas pruebas es conocer si alguno de los miembros de la pareja
padece alguna enfermedad que pudiera representar unos impedimentos para la salud
del matrimonio o bien como prevención de problemas de salud futuros.